Este vodka es el resultado del esfuerzo y meticulosidad de los maestros de la destilería Mariinsky.
Transparente y límpido, en nariz sorprenden las notas a malta, de alcohol suave.
En boca es denso, sabroso y delicado, sedoso, con un final refrescante, equilibrado y profundo. Un vodka para degustar sólo o mezclado.